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Las campañas políticas en tiempos de COVID-19

  • Foto del escritor: Subversivo_mx
    Subversivo_mx
  • 18 ago 2020
  • 2 Min. de lectura

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REGINA CARLIN

Es evidente que el COVID‑19 ha venido a cambiar nuestras relaciones sociales, nuestros

patrones de comportamiento y las rutinas de la sociedad. Los procesos electorales no podrían estar exentos de estas modificaciones.

Alrededor del mundo ya hay evidencia de estos cambios. En Francia, el pasado 15 de marzo se realizó la primera vuelta de las elecciones regionales, en la cual menos de la mitad de los franceses acudieron a las urnas. Lo anterior, puede explicarse ya que la tasa de contagio ya venía escalando con más de 5 mil contagiados.

Por su parte, en cuanto a campañas, en Estados Unidos, por ejemplo, los candidatos se vieron obligados a bajar considerablemente su nivel de actividad; Biden y Sanders, cancelaron mítines. Las salidas y los recorridos puerta a puerta (canvassing), también se han visto afectados.

En México, tendremos elecciones el año que viene. Estas elecciones intermedias, que están básicamente a punto de llegar, vienen acompañadas por campañas políticas que llegarán aún antes, o mas bien, ya llegaron.

Dicen que toda crisis esconde una oportunidad detrás, para muchos de los puestos locales que tienen la posibilidad de reelegirse en este próximo proceso, este consejo está siendo aprovechado durante esta pandemia. Los gobiernos municipales han estado dando apoyos económicos, despensas y trabajos temporales a sectores vulnerables que en verdad lo requieren, pero siempre con la suficiente propaganda para que en unos meses no se les olvide quien los estaba ayudando.

La manera en la que los gobiernos han estado manejando la crisis puede ser la mejor o peor de las publicidades. Este proceso tiene 15 gubernaturas en disputa, y re imaginar los típicos procesos de campaña bajo la nueva normalidad es todo un reto.

Pensando en los tradicionales mítines, llenos de personas, unos pegados a otros, porras, canciones, la torta y el jugo pasando de mano en mano. Esta dinámica, traducida a tiempos de COVID, sería algo así: un salón grande o abierto para que haya distancia entre las máximo 50 personas, todas con cubrebocas. Los candidatos que ignoren las recomendaciones, seguramente serían linchados por la opinión pública por irresponsables.

¿Qué pasará con todos los souvenirs? Supongo que en lugar de mochilas, relojes y gorras con los logos del partido ahora se dará gel antibacterial o sanitizantes, cubrebocas con los colores y logos de los candidatos, etc.

Es obvio que las necesidades que está creando la pandemia deberían estar en las prioridades de estos candidatos. La educación a distancia, mejorar los sistemas de salud y generar empleo seguramente serán los principales temas de campañas.

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